El ácido hialurónico es una sustancia que se encuentra de forma natural en nuestro organismo. Forma parte del colágeno que se encuentra en nuestra piel y ayuda a mantenerla hidratada y jugosa. Aún así, con el paso de los años, esta sustancia comienza a disminuir su producción de forma considerable alrededor de los 35 años. En ese momento nuestro rostro comienza a cambiar a causa de la pérdida del ácido hialurónico en la piel, volviéndose menos firme y perdiendo volumen. Como consecuencia, empiezan a aparecer arrugas y se acentúan las líneas de expresión. ¿Quieres conocer las funciones y beneficios del ácido hialurónico en nuestra piel? Te lo contamos todo.
¿En qué parte del cuerpo se encuentra el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico se encuentra de forma natural en casi todas las células del cuerpo y se produce en altas concentraciones en ubicaciones específicas. En cada ubicación del cuerpo, cumple una función diferente. Por esta razón, es necesario que el cuerpo se reponga continuamente con de ácido hialurónico. Podemos encontrar ácido hialurónico en los huesos y cartílagos, tendones y ligamentos, en el cuello cabelludo, los labios e incluso en los ojos, pero sobre todo en la piel
El ácido hialurónico en la piel
Aunque el ácido hialurónico se puede encontrar en la mayoría de las células del cuerpo, la mayor concentración se encuentra bajo la piel, ya que casi el 50% del ácido hialurónico del cuerpo se encuentra aquí: tanto en las áreas dérmicas subyacentes profundas como en las capas superiores epidérmicas visibles.
La piel joven es suave y elástica y contiene grandes cantidades de ácido hialurónico que ayuda a mantenerla fresca y saludable. Además, le proporciona una humedad continua, pero con la edad, la capacidad de la piel para producirla comienza a disminuir.
La piel es el órgano más grande del cuerpo que comprende aproximadamente el 15% del peso corporal. El ácido hialurónico y el colágeno son vitales para mantener las capas y la estructura de la piel sana y elástica. Es el colágeno el que le da firmeza a la piel, pero es el ácido hialurónico el que nutre e hidrata el colágeno. Puedes imaginarte el colágeno como las fibras elásticas que restauran la forma de la piel cuando se estira.
El colágeno podría compararse a una banda elástica: estira esa banda elástica un millón de veces, como lo que hacemos con nuestra piel, y sin humedad, y terminará por estirarse demasiado, secarse y probablemente romperse. Esta es la misma forma en que el colágeno en nuestra piel reacciona dejándola necesitada de humedad. Ahora imagina que la misma banda elástica se estira un millón de veces bajo el agua todo el tiempo. Las posibilidades de que esa banda de goma se seque y se rompa son mínimas. Considera el ácido hialurónico como el agua que mantiene el colágeno húmedo y elástico.
Es decir, la piel joven es lisa y altamente elástica porque contiene altas concentraciones de ácido hialurónico, lo que ayuda a la piel a mantenerse saludable y sin arrugas. A medida que envejecemos, el cuerpo pierde su capacidad de mantener esta misma concentración en la piel. Con la disminución de los niveles de ácido hialurónico en la piel, también aumenta la capacidad de la piel para retener agua. El resultado: la piel se vuelve más seca y pierde su capacidad para mantener su hidratación. El ácido hialurónico actúa como un relleno al unirse al agua y así mantener la piel libre de arrugas.
Las funciones del ácido hialurónico
Como ves, el ácido hialurónico es un componente clave para el buen funcionamiento de muchos de nuestros tejidos, pero realmente su salto a la fama se dio cuando se empezó a utilizar como ingrediente en tratamientos de belleza estética por sus extraordinarias propiedades antiedad. En inyecciones, cremas o en suplementos alimenticios, el ácido hialurónico está triunfando en el ámbito de los cuidados y tratamientos de la piel. A continuación te explicamos algunas de las funciones y beneficios comentados en el apartado anterior.
- Hidratación
Su capacidad de absorción lo hace un ingrediente altamente hidratante. Pero no solo eso, sino que también ayuda a que esta se mantenga en tu piel.
- Creación del colágeno
Fomenta la creación del colágeno, encargado de sostener nuestra piel para que no salgan arrugas.
- Rejuvenecer la piel
Cuando nuestra piel envejece, también se pierde una importante cantidad y capcaidad de hidratación, estando el ácido hialurónico directamente relacionado en el proceso. Por eso, el ácido hialurónico sirve para dar mayor hidratación y elasticidad a nuestra piel, mejorando su aspecto notablemente.
- Eliminar y reducir arrugas
Su acción rellenante aporta volumen a nuestra piel y esto ayuda a eliminar arrugas y líneas de expresión. Aunque resulta mucho más efectivo inyectado, el ácido hialurónico también ofrece buenos resultados aplicados en cremas y tratamientos de belleza.
¿Cómo aplicar ácido hialurónico a tu piel?
Como te hemos comentado anteriormente, puedes aplicarte el ácido hialurónico de varias maneras:
- A través de cremas, siendo el ácido hialurónico su componente principal
Aunque sus resultados son un poco más lentos, son notables. Puedes devolver la hidratación a tu piel y alisar visiblemente las arrugas si utilizas una buena crema con ácido hialurónico.
- Mediante complementos alimenticios
Si lo que queremos es regenerar los cartílagos y fomentar la producción de colágeno en nuestra piel, el ácido hialurónico suministrado en complementos alimenticios es una buenísima opción. Al ser ingerido ayuda contra el envejecimiento general de nuestro cuerpo.
- Por medio de inyecciones
Las inyecciones de ácido hialurónico sobre la piel generan una malla que beneficia el buen funcionamiento de los tejidos. Alisa la piel y rellena las arrugas y líneas de expresión en las zonas donde se inyecta (como labios, pómulos, arrugas, ojeras, etc.) y además mantiene las moléculas de agua para favorecer la hidratación. Cuando es utilizado en las articulaciones, se encarga de acelerar los procesos de curación y regeneración, como por ejemplo, en pacientes con artrosis.
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